"Actualmente el mundo es estable. La gente es feliz; tiene lo que desea y nunca desea lo que no puede obtener. Está a agusto, a salvo; nunca stá enferma; no teme la muerte; ignora la pasión y la vejez; no hay padres ni madres que estorben; no hay esposas ni hijos ni amores excesivamente fuertes. Nuestros hombres están condicionados de modo que apenas pueden obrar de otro modo que como deben obrar. [...] Pero éste es el precio que debemos pagar por la estabilidad. Hay que elegir entre la felicidad y lo que la gente llamaba arte puro. Nosotros hemos sacrificado el arte puro."
No creo que todo sea tan blanco y negro como el futuro que Aldous Huxley nos presenta en Un Mundo Feliz. Un mundo donde la civilización está perfectamente ordenada, las personas nacen en probetas donde se controla cada una de sus moléculas, creciendo bajo preceptos que se les inculcan desde pequeños y te enseñan a ser feliz. En contraposición aparecen los Salvajes, un grupo de gente que decidió no guiarse por la ciencia y ser fieles a sus religiones y rituales, dominados por sus emociones.
En realidad, los "civilizados" lo que han hecho es acabar también creyendo en la ciencia, algo que no se aleja mucho de ciertas posturas que he visto hoy en día, donde parece que lo que diga la ciencia es 100% fiable, sin tener en cuenta que precisamente la ciencia avanza porque se descubren los errores del pasado. De la misma forma, tampoco entiendo por qué el Salvajedecide que debe autocastigase como penitencia, cuando no ha hecho nada de lo que arrepentirse.
Realmente espero que las cosas no tiendan hacia ninguno de estos dos extremos. Para empezar porque realmente creo que se puede ser feliz sin necesidad de que te condicionen y sin tener que rendirle cuentas a ningún Dios. Y también porque realmente sería muy triste perder la individualidad que se está consiguiendo en los últimos años en los que cada vez más gente decide por si misma lo que quiere hacer con su vida.
En el equilibrio está la clave. Por eso me gusta tanto "Lost". Apuesta por una fe racional, o una ciencia mística. Ningún extremo es positivo.
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